El término FireWire resulta familiar, sobre todo, para los usuarios de PC interesados en el campo del vídeo digital. Pero, más allá de este campo concreto, se trata de un bus serie similar al USB, que admite la conexión de una gran variedad de dispositivos.
El bus FireWire fue introducido por Apple (con antelación a USB), y más tarde fue estandarizado bajo la especificación IEEE 1394, referido como un bus serie de altas prestaciones. FireWire alcanza velocidades de transferencia de 400 Mbps y permite la conexión de hasta 63 dispositivos.
La mayoría de ventajas comentadas para USB están presentes en FireWire (Plug & Play, conexión/desconexión sin apagar el PC, alimentación incluida en el bus, etc.). Una primera diferencia se encuentra en el cable, que empaqueta un total de 6 cables internos (2 para alimentación, y dos pares trenzados para datos). Otra diferencia fundamental hace referencia a la topología del bus: en lugar de emplear hubs, se emplea una configuración “en cadena”. En otras palabras, los dispositivos se unen uno a otro formando una cadena, en la cual es posible insertar más de un PC (haciendo posible que varias computadoras accedan a los dispositivos conectados).
En términos de velocidad de transferencia, FireWire supera con creces a USB 1.1, pero es muy similar a USB 2.0. FireWire esta orientado a dispositivos con elevados requerimientos de ancho de banda. En cambio, no resultaría rentable fabricar dispositivos lentos para este bus, algo que lo pone en desventaja respecto a USB 2.0 (que admite ambos tipos con un reducido coste). En términos de coste, hay que señalar que la implementación de FireWire resulta más cara que en el caso de USB.
Finalmente, es muy importante notar que FireWire trabaja con una filosofía peer-to-peer, lo que significa que -en oposición a USB- no precisa de la presencia de un dispositivo anfitrión (el PC). Por ejemplo, es perfectamente posible interconectar dos cámaras mediante FireWire sin necesidad de un PC.
No hay comentarios:
Publicar un comentario